Por otro lado, y no me parece de extrañar, en esta misma noticia, me llama poderosamente la atención la frase que nos deja John Stewart, director de la campaña «Desafiando a las grandes tabacaleras» en la que dice: «En los últimos dos años la industria tabaquera ha desplegado plenamente sus esfuerzos para presionar y coaccionar a los gobiernos en su favor al margen de la ley». No hace falta ser muy perspicaz para entender, que la industria tabaquera estará “pagando bajo la mesa” a infinidad de cargos políticos, instituciones, y a todo aquello que le pueda hacer sombra en su afán por minar las voluntades de las personas. Entonces, ante esta expectativa ¿nos enfrentamos a más demagogia por parte de los países y sus políticos? o por el contrario, nos enfrentamos a una suma de acuerdos para percibir más financiación. Ya no lo tengo claro. Quizá sean ambas parte de la falacia a la que ya nos tienen acostumbrados, y como siempre el dinero prevalece a la salud.
Alx